Tras esparcir las cenizas de Joshua en la montaña cerca del monasterio de Rongbuk, David parte de regreso a Boston con el «libro marrón», regalo de Joshua antes de morir. Se siente lleno de esperanza y de ilusión, pues ha cerrado un capítulo de su pasado y ahora está preparado para empezar una nueva etapa.
Ya en Boston, David tiene ocasión de poner en práctica las enseñanzas de Joshua y de ayudar a su amigo Alex, quien está pasando por una gran depresión tras sufrir un drama familiar. Y una vez más le ocurrirá algo inesperado que lo enfrentará a nuevos dilemas y lo conducirá hasta Victoria, una misteriosa mujer que le descubre el verdadero significado del amor.
Con «Un lugar llamado Destino», el autor nos propone un nuevo reto, a la vez que nos recuerda que el cambio es posible para aquellos que se atreven a intentarlo.
A través de la historia de David, Javier Iriondo nos desvela las claves para enfrentarnos a los desafíos que nos depara la vida: el amor en pareja, la amistad, la búsqueda de uno mismo y la realización personal.